¿Disfrutaremos de unas vacaciones tranquilas?

Dejamos atrás una semana de volatilidad con resultado positivo en los principales índices de renta variable internacional. El comportamiento de los mercados de la pasada semana es propio de un movimiento de consolidación. A principios de semana el repunte de la inflación y la rápida expansión de los casos provocada por la variante delta aumentó el nerviosismo de los inversores barajando una posible caída de la actividad en el segundo semestre. No obstante, la publicación de buenos resultados empresariales y la insistencia de los Bancos Centrales de la laxitud de sus políticas monetarias han ayudado a que los índices terminen la semana en positivo. El S&P 500 avanzó un 1,96% en la semana y el Euro Stoxx 50 un 1,82%. Las compañías tecnológicas continúan siendo protagonistas siendo el índice Nasdaq 100, con su subida semanal del 2,93%, el que mejor desempeño semanal ha mostrado entre los principales.

Los Bancos Centrales están demostrando que quieren un verano tranquilo y en la reunión de la pasada semana el BCE aseguró que no espera cambios significativos hasta que la inflación se mantenga de forma sostenida por encima del 2%. La semana en la que tramos es el turno del Banco Central de EE.UU. del cual se espera que cumpla este guion el próximo miércoles, en la reunión de tipos de su comité FOMC. No esperamos pronunciamientos sobre adelantos en las subidas de tipos, que se apuntan para 2023, y para tener una visión quizás más concreta tendremos que esperar a la reunión de banqueros centrales de Jackson Hole a finales de agosto.

Los datos macro y resultados empresariales que se van conociendo también apuntan a un verano sin sobresaltos. Los PMIs de Alemania y la eurozona han mostrado cifras superiores a las esperadas y el 85% de las compañías del S&P 500 que han presentado resultados han superado las previsiones del mercado.

Los temores que puede generar el incremento de contagios con la variante delta, la quinta ola y la vuelta de algunas medidas de restricción, no parecen ser suficientes para que se produzca un giro inesperado en la novela de los mercados financieros de este 2021. El ritmo de vacunación creciente y el impacto de los nuevos contagios especialmente en la población joven, menos vulnerable, limitan las consecuencias que esta nueva ola puede generar sobre la actividad económica.

Esta última semana de julio podemos continuar con algo de volatilidad por las tentaciones propias de los inversores a reajustar sus carteras hacia posiciones más defensivas antes de irse de vacaciones, pero tomar decisiones de este tipo puede ser un error que reste retornos a las carteras en el balance anual. Avanzamos en un verano tranquilo en el que no han variado los fundamentos de la inversión que se vienen fijando para este 2021. Predilección por la renta variable, soportada por bancos centrales y con mayores retornos que la renta fija. Una renta fija estable, sobre controlada por los Bancos Centrales. Liquidez y estímulos abundantes durante mucho tiempo que favorecen a compañías con compromiso de sostenibilidad, vinculadas con las infraestructuras y el gasto público y compañías de tendencias y crecimiento.

Si mantenemos construida la cartera en base a estos principios podemos irnos de vacaciones con tranquilidad y sin tener que realizar ningún ajuste en estas fechas. Quien no haya considerado estos principios en su construcción de cartera puede aprovechar la volatilidad del final de julio y principio de agosto para reorientarla hacia ellos. Puede que la novela de los mercados de este 2021 sea poco emocionante, sin giros inesperados, pero en el mundo de los mercados esto es una bendición que esperamos continúe durante algo más de tiempo. Dejaremos la emoción y la sorpresa para la novela que vayan a poner en la maleta estas vacaciones.

CITAS ECONÓMICAS DE LA SEMANA

Lunes: PMI manufacturero y de servicios de Japón. Índice IFO de confianza empresarial en Alemania.

Martes: Confianza del consumidor de The Conference Board en USA.

Miércoles: Reunión de tipos del FOMC de la FED y rueda de prensa posterior.

Jueves: IPC y tasa de desempleo en España y Alemania. Confianza del consumidor de la zona euro. Nuevas peticiones de subsidio de desempleo en EE.UU.

Viernes: Desempleo en Japón . PIB de España y Alemania. IPC y PIB de la eurozona.

Las apuestas por la “reflación” a la baja

Dejamos atrás una semana desigual en el comportamiento de los principales índices de Renta Variable. Una semana en que se vivió un primer conato de recogida de beneficios el pasado jueves, después del mercado alcista del primer semestre, pero que quedó olvidado el viernes con la recuperación de los niveles previos. Aun así, la incertidumbre generada de nuevo con la propagación del virus ha tenido un efecto especialmente negativo en las regiones ligadas al ciclo económico, como emergentes y Europa. Los mercados asiáticos se ven afectados por las medidas de restricciones que se están tomando ante la variante Delta del coronavirus y en Europa los sectores y economías ligadas al turismo, como es España, sufren especialmente el nuevo rebrote. Los sectores defensivos han sido los que mejor resultado han demostrado en la semana, especialmente salud y consumo no discrecional.

Wall Street salvó la semana en positivo, ajena a las preocupaciones por las nuevas variantes del coronavirus. El S&P 500 avanzó en la semana un 0,40%, el Dow Jones un 0,24% y lideró las subidas el Nasdaq 100 con un avancé del 0,67%. Contrasta con la caída del 0,40% del Eurostoxx 50 y del 1,47% del IBEX 35.

La semana también se vio marcada por la comparecencia de Christine Lagarde, presidenta del BCE, que anunció la revisión estratégica de su política monetaria, donde el BCE buscará una inflación del 2% en el medio plazo. Anteriormente, el BCE tenía como objetivo estar por debajo, pero cerca del 2% y ahora confirma las expectativas del mercado que podría dejar que la inflación se disparase por encima del objetivo. El BCE cumple así con el guion previsto y favorable al mercado.

La vuelta a las restricciones, debido al rebrote de casos vinculados a las nuevas variantes del coronavirus, puede tener un impacto a corto plazo en la recuperación económica y afectar a las expectativas del mercado, pero también puede servir de inesperada herramienta que ayude a un crecimiento más controlado, con una menor inflación. En otras palabras, que aliente el alargamiento de las políticas monetarias expansivas y de estímulo, aspecto favorable al mercado. Vuelve a sonar aquello de que cuanto peor, mejor.

De hecho, el giro bajista de las últimas semanas en los intereses de la deuda apunta a una previsión de crecimiento con menor inflación. El bono a 10 años estadounidense marcó el pasado jueves el mínimo desde febrero, por debajo del 1,30%. La teoría de la “reflación”, recalentamiento económico por los estímulos monetarios y fiscales e inflación, pierde fuerza. Esto va a obligar a una revisión de los posicionamientos en activos y duraciones basados en esta teoría.

El escenario favorable al ciclo alcista, alargado en el tiempo y con una normalización monetaria estable, va tomando paulatinamente el centro de la escena. Las compañías favorables a las tendencias se van imponiendo nuevamente a las cíclicas, pero no conviene perder de vista las oportunidades que ofrecen estas últimas. En este escenario de mercado las correcciones deben ser interpretadas como oportunidades, en cualquier estrategia.

Para la semana entrante cabe esperar un mejor comportamiento en los mercados, ya que comienzan a publicarse resultados empresariales del segundo trimestre. Se espera buenas cifras, incluso mejorando los datos del segundo trimestre de 2019. También conoceremos el dato de inflación del mes de junio en Estados Unidos. Las previsiones para el dato interanual es que sea inferior al de mayo, lo que apoya el mensaje de los bancos centrales de que los valores altos de inflación son transitorios.

CITAS ECONÓMICAS DE LA SEMANA

Lunes: Nuevas prestamos en China.

Martes: IPC de Alemania y EE.UU. Reunión del Ecofin. El Tesoro español subastará letras a 3 meses.

Miércoles: IPC de España y Gran Bretaña. Producción industrial de la eurozona. Libro Beige de la Fed.

Jueves: PIB y producción industrial en China. El Tesoro español subastará bonos a 3 y 5 años y obligaciones a 10 años. Nuevas peticiones de subsidio de desempleo y producción industrial en EE.UU.

Viernes: IPC de la eurozona. Ventas minoristas en EE.UU.

¿Que esperar de los mercados hasta final de año?

La pasada semana se cerro un buen primer semestre del año, en lo que al comportamiento de los mercados financieros se refiere. Wall Street en máximos históricos y a pesar de los retrocesos en el mes de junio, la bolsa europea en máximos desde el 2007 y Japón en niveles no vistos desde el año 90. La deuda soberana y el crédito soportando bien los embates de una posible inflación. La rentabilidad del bono a 10 años estadounidense se ha alejado de los máximos alcanzados en marzo y los spreads del crédito investment grade en EE.UU. en mínimos de 2005 mientras que en High yield el spread se sitúo en mínimos de 2007. A pesar de la cuarta ola de la pandemia y de los riesgos inflacionarios, los mercados han dado juego para acumular unos jugosos retornos en las carteras de inversión. Pero la pregunta que se hacen los inversores en este punto es ¿Continuará esta tendencia positiva en el segundo semestre del año?

Escuchamos que hay una corrección cerca, que las probabilidades de la misma aumentan según se van superando los máximos, pero una adecuada corrección, de producirse, no es un cambio de tendencia. La cercanía de las vacaciones nos invitan a descansar y para ello reducir la exposición al riesgo, esta circunstancia se produce todos los años. Pero, además de haberse demostrado que no es garantía de protección ni de acierto si consideramos la serie histórica , no es un motivo para un cambio de tendencia. El mes de julio tiene históricamente un comportamiento bueno, en la serie histórica del S&P 500 1950-2019, la rentabilidad media es del 1,09%, agosto ligeramente negativo-0,07% y el peor mes es septiembre con una rentabilidad media de -0,43%. Por lo tanto, el resultado global de los meses de verano en el S&P 500 es positivo.

Deberíamos esperar alguna circunstancia de mayor enjundia para que en los próximos meses cambie el guión previsto para este año de la recuperación económica. Este guión está protagonizado por los bancos centrales y su promesa de continua liquidez. La acción se desarrolla en un entorno de recuperación económica donde los datos macro y los resultados empresariales presenta una mejoría continuada. El villano que amenaza con acabar con el mundo, tal cual lo conocemos, es la inflación, pero no asusta a los superheroes protagonistas. En el guión hay algunas estrellas invitadas, que no son otras que las criptomonedas. Debido a su gran ambición y aparición estelar amenazan con ser el centro de la escena, pero su brillo se apaga paulatinamente en favor de los personajes habituales y más tradicionales como son las bolsas, que aportan un mayor fundamento a la interpretación.

Esta es la escena que deberíamos monitorizar en busca de cambios relevantes. Cambios como un empeoramiento de los resultados empresariales, los del segundo trimestre del año empezaran a conocerse a mediados de este mes de julio, algún movimiento en falso de los bancos centrales o alguna reacción brusca en las curvas de tipos. Parece difícil que alguna de estas circunstancias se de a corto plazo y que además suponga una ruptura en el equilibrio actual de crecimiento económico y política monetaria.

Esto nos sugiere que los activos de riesgo tradicionales mantendrán la tendencia positiva el próximo semestre, más aun si cabe ante la pérdida de brillo del bitcoin, activo refugio de moda en los últimos meses. El dinero esta regresando a la bolsa, garantía de retornos con una relación rentabilidad riesgo más eficiente y unas valoraciones soportadas en fundamentales. Esto no quiere decir que debemos dejar de monitorizar las criptomonedas porque, como índico, hay una correlación con los activo tradicionales. Incluso, las no descartables convulsiones en estos activos podrían generar alguna inestabilidad en los mercados, de la que convendría estar prevenidos.

La semana en la que entramos los indicadores macro económicos serán los protagonistas. Se conocerán los índices PMI de las principales economías mundiales y el indice ZEW de confianza inversora en Europa y Alemania. También se publicarán las actas de las última reunión del FOMC de la FED. Tras los máximos en WS de la pasada semana podemos vivir alguna corrección en esta. Corrección que puede ser aprovechada para construir cartera.

CITAS ECONÓMICAS DE LA SEMANA

Lunes:PMIs de las principales economías mundiales. Confianza del consumidor en España.

Martes: Índice ZEW de confianza inversora en la eurozona y Alemania. El Tesoro español subasta letras a 12 meses. Ventas minoristas de la zona euro. PMI en EE.UU.

Miércoles: Previsiones económicas del UE. Actas de la última reunión del FOMC de la FED.

Jueves: Comunicado del BCE sobre política monetaria. Nuevas peticiones de subsidio de desempleo en EE.UU.

Viernes: IPC de China. PIB de Gran Bretaña. Informe de política monetaria de la FED.