Las criptomonedas, ¿son los tulipanes del siglo XXI?

Se cerró una nueva semana en positivo en los índices de renta variable tanto en Europa como en Estados Unidos. El S&P 500 se encuentra en zona de máximos históricos mientras que el EuroStoxx 50 supera ya los 4000 puntos, niveles no vistos desde 2007. En la agenda macro los datos más relevantes fueron el PIB de China, sus ventas al por menor y su producción industrial, con un crecimiento interanual del 18,3%, 34% y 14,1 % respectivamente. Unas cifras mixtas, mientras el PIB ha estado en línea con el consenso, las ventas al por menor han superado las expectativas y la producción industrial ha quedado por debajo de lo esperado. En el apartado corporativo comenzó con buen pie la temporada de publicación de resultados empresariales en EE.UU. Los Bancos, los primeros en publicar resultados, superaron expectativas, con ingresos y beneficios superiores a los esperados.

Pero, la pasada semana aumento considerablemente la atención que los inversores prestaron al mercado de las criptodivisas, con la salida a bolsa de la firma de criptomonedas Coinbase, que gestiona una de las principales plataformas de compraventa de bitcoins y otras divisas digitales. La cotización de esta plataforma fue vista como el último paso para que las criptomonedas ganen una mayor aceptación entre los inversores tradicionales. Esto ha supuesto que las últimas semanas las valoraciones de las criptomonedas se disparasen. Incluidas monedas digitales menos conocidas, como el Dogecoin, que se creó como una broma, y ha subido un 440% este último mes.

El precio del bitcoin aumentó más del 300% el pasado año y este se anota un 91%, debido a que empresas como Testla, Mastercard y BlackRock informaron de planes para incorporar monedas digitales en sus negocios.

El interés creciente por las criptomonedas ha generado un mercado de transacciones del que se ha aprovechado la compañía estadounidense Coinbase, debido a que las comisiones por operación de las transacciones con criptomonedas son su principal fuente de ingresos.

Pero, para todo aquel que tenga tentaciones de participar en la fiesta de las criptomonedas, conviene que tenga en consideración cierta información antes de decidir poner su capital en juego.

Hay alrededor de 9.231 monedas digitales, aunque solo menos de 100 tienen capitalización por encima del nivel de 1000 millones de dólares. La mayoría de estas 9.231 monedas digitales pasarán a ser inútiles en el futuro. Si nos centramos en las principales monedas su utilización como moneda de pago es muy limitada, a pesar de que determinadas compañías la anuncien que las admiten y normalmente solo refiriéndose al bitcoin.

La tecnología en que se basan es el blockchain, cadena de bloques, que permite hacer transacciones seguras entre personas de todo el mundo sin necesidad de intermediarios. Es una tecnología que ofrece garantías y seguridad en la verificación de los datos de transacciones, pero que también puede ser utilizado por otros sectores y no solo en transacciones de criptomonedas. Por lo que las criptomonedas, no son imprescindibles para el desarrollo y utilización de esta nueva y prometedora tecnología digital. Además la llamada minería de las monedas digitales supone un consumo importante de recursos de energía que puede ser dañina para el medio ambiente.

Otro aspecto a tener en cuenta es que muchas de estas monedas digitales no son tal, sino que son tokens, es decir que solo sirven para acceder a determinados servicios digitales y de publicidad.

La regulación de las mismas está en entredicho. Por algunos organismos son considerados como valores mientras que otros consideran que son dinero o un sustituto de la moneda. En cualquier caso, la descentralización de la criptomonedas, una de sus virtudes, puede convertirse en su espada de Damocles ya que las autoridades pueden tomar medidas para limitarlas o incluso cerrarlas. En un mundo de criptomonedas no existirían las políticas monetarias, por lo que las autoridades perderían su principal herramienta de intervención para el control de la economía. Además, las criptomonedas han sido vinculadas con el crimen organizado.

Con todo esto, el interés creciente por las criptomonedas y la espectacular revalorización de las mismas no cabe sino buscarlo en el exclusivo afán especulativo y del enriquecimiento fácil, especialmente de la población más joven. Lo que hoy tenemos es una simple especulación sobre los tulipanes del siglo XXI. Se están revalorizando unos boletos que solo sirven para utilizarlos en un festival de música en el que estamos inmersos. Mientras permanezcamos en el recinto del festival, los toquen, que se utilizan para consumir en el mismo, son cada vez más apetecibles porque el organizador ha emitido un número limitado. Además nos hemos dado cuenta que podemos especular con ellos, porque tienen una tendencia alcista por concepto. Pero, ¿qué sucederá el día que se acabe el festival?

Sin menospreciar el desarrollo tecnológico que aporta el campo abierto por el bitcoin, la falta de un respaldo consistente hace que la revalorización de las criptomonedas sea lo más parecido a la burbuja de los tulipanes, que en los años 30 del siglo XVII estalló en los Países Bajos.

Por todo esto, el que decida poner su capital en criptomonedas no debería hacerlo sin ser consciente que tiene una probabilidad alta de que lo pierda y de que en los festivales siempre hay un día de clausura. Hay que evitar quedar atrapado entre el barro de la campa del festival. El que quiera un respaldo para su capital que piense en los activos tradicionales, por ahora.

La semana en la que entramos la atención del mercado seguirá pendiente del avance del despliegue de las vacunas y los estímulos fiscales. En la agenda macro destacar los datos preliminares de PMI y la reunión del BCE.

AGENDA ECONÓMICA DE LA SEMANA

Lunes: Balanza comercial de Japón

Martes: Desempleo en Gran Bretaña. Subasta de la tasa de préstamo preferencial del Banco Popular de China.

Miércoles: IPC en Gran Bretaña

Jueves: Reunión de tipos del BCE y rueda de prensa posterior. Confianza del consumidor en la zona euro. El Tesoro español subastara bonos a 3 y 5 años y obligaciones a 10 años.

Viernes: PMIs manufactureros y de servicios de las principales economías mundiales.

Sin motivo para que las bolsas se frenen.

Semana positiva para los índices de renta variable tanto en Europa como en EEUU. El S&P 500 se encuentra en zona de máximos históricos cerca de los 4.100 puntos mientras que el Eurostoxx 50 se acerca a los 4.000 puntos, niveles no vistos desde 2007. Lo más destacado de la semana ha sido la actualización de perspectivas de crecimiento económico del FMI, aumentando un 0,5% las expectativas de crecimiento para la economía mundial hasta el 6% en 2021 y un 0,2% hasta el 4,4% en 2022. Esta revisión al alza se apoya en el nuevo paquete de estímulos en EEUU y la aceleración de la campaña de vacunación en todo el mundo.

En la agenda macro, conocíamos esta pasada semana datos mixtos. La parte positiva ha sido los datos de PMI servicios en Europa, cuyas cifras han sido mejores de lo estimado por el consenso mientras que en la parte negativa encontramos los datos de producción industrial en Europa, muy por debajo de lo esperado.

Pero esta pasada semana, además de la consolidación de los máximos de las bolsas, nos deja tres constataciones de importancia para el devenir de los mercados. La primera es que ha finalizado la rotación de carteras hacia sectores value o cíclicos. Los valores tecnológicos vuelven a ser protagonistas. El Nasdaq 100 lideró las subidas semanales con un +3,87%. La segunda, la tensión sobre la rentabilidad del bono estadounidense a 10 años se ha reducido, cierra la semana en niveles del 1,66%. El mercado parece que comienza a creerse el discurso de los banqueros centrales. Estas dos primeras constataciones están estrechamente relacionadas porque, como sabemos, la estabilidad en los tipos a largo beneficia a las compañías más growth. Y la tercera, y no menos importante, el crecimiento económico va a un ritmo mejor de lo esperado, apoyado en una vacunación que se acelera.

Cada vez son menos los motivos para considerar excesivamente altas las valoraciones actuales de la renta variable, incluidas las de las compañías tecnológicas. Las expectativas de crecimiento y de mejora de resultados empiezan a hacer razonables, e incluso atractivas, las valoraciones actuales dentro del mar de liquidez en que nos vamos a mover en los próximos años.

A partir de ahora entramos en una fase de estabilidad, después de los ajustes que hemos vivido los dos últimos meses del primer trimestre del año. De estabilidad, pero de gran importancia para el resultado anual. La publicación esta semana de los PIB trimestrales y de los resultados empresariales, que también comienzan a publicarse esta semana, van a apuntalar las valoraciones de los activos de riesgo y van marcar el recorrido que pueden realizar los próximos meses. Por lo tanto, esta semana deberemos estar muy atentos a las previsiones que realicen las compañías y las autoridades económicas.

Se espera que este primer trimestre el PIB interanual de China crezca un 18,8% y que los resultados empresariales, cuya publicación comienza esta semana, crezcan un 47% en Europa y un 24% en las compañías del S&P 500, respecto al primer trimestre del pasado año. Si a esto acompañan unos datos de inflación razonables, como parece, podemos ver un buen comportamiento de las bolsas esta semana.

En mi época de universitario, uno de mis profesores de estadística me dio una clave cuando se trata de hacer pronósticos. Una clave con base estadística, decía. Si quería pronosticar lo que sucedería al día siguiente en cualquier ámbito de difícil predicción, como la meteorología por ejemplo, lo mejor es pronosticar que será igual que hoy y quizás un mínimo cambio no relevante. La probabilidad del éxito aumenta considerablemente con esta técnica.

Los datos nos dicen que hoy nos encontramos inmersos en una tendencia positiva y lejos de realizar un análisis predictivo en profundidad con técnicas estadísticas de modelización, big data o técnicas de aprendizaje automático, en estos momentos prefiero aplicar la técnica del pronóstico de mi profesor de estadística. Por lo tanto, mañana la tendencia positiva continuará con pequeños cambios no relevantes.

Citas económicas de la semana:

Lunes: Ventas minoristas de la zona euro.

Martes: PIB en Gran Bretaña. Índice ZEW de confianza inversora en Alemania. IPC en EE.UU.

Miércoles: IPC en España. Producción industrial en la zona euro. Libro Beige de la Fed.

Jueves: IPC Alemania. Balanza comercial de España. Nuevas peticiones de subsidio de desempleo en EE.UU. Ventas minoristas en EE.UU.

Viernes: PIB de China. IPC de la zona euro. Reunión del Eurogrupo.