Sin duda alguna el tono del mercado ha mejorado en las dos últimas semanas. A la bajada en los índices de volatilidad se ha unido una recuperación de un 15% del S&P 500 y que el índice tecnológico Nasdaq 100 se haya situado un 1% por encima del cierre del año 2019. En este caso después de haber cotizado, el 20 de marzo, con un descuento de hasta el 20% en lo que iba de año. El índice tecnológico norteamericano se ha visto beneficiado por el buen desempeño de las biotecnológicas y las compañías vinculadas con el comercio y media on line. Todo esto nos lleva a dos reflexiones rápidas. En primer lugar lo peor ya ha pasado y entramos en una zona constructiva y en segundo lugar que en la nueva normalidad tendremos nuevos ganadores y perdedores. Dos reflexiones que no debemos olvidar los inversores en la toma de decisiones partir de ahora.
No es de extrañar por lo tanto que veamos unos sectores, e incluso índices, con peor comportamiento que otros. La desescalada del impacto del coronavirus en los mercados financieros también va a ser asimétrica. Y esta asimetría va a afectar a todo los tipos de activos. La asimetría la veremos por regiones pero muy especialmente por sectores y temáticas de inversión.
Esta pasada semana el impulso de los mercados ha sido consecuencia de la proyección, por parte de los distintos gobiernos, de medidas de desescalada del confinamiento y calendarios para que la actividad laboral y económica vuelva a la normalidad. El aparente control de la epidemia, según las cifras de contagios y muertes han dejado de aumentar exponencialmente, ha hecho que los gobiernos pongan más peso en la reactivación económica. Inclinando así la balanza en detrimento de la alerta sanitaria. Un aspecto valorado como muy positivo por los mercados y que representa un punto de inflexión hacia la reconstrucción. Supone también un efecto llamada a la toma de posiciones que probablemente veremos intensificada esta semana.
Pero en este frenesí de vuelta no debemos olvidar dos aspectos. En primer lugar, como bien saben los avezados montañeros, debemos tener mucho cuidado en la desescalada. Un tropezón en esta fase puede dar al traste con toda la expedición y con el supuesto éxito de haber hecho cumbre. Así que no se puede cantar victoria todavía, deberemos ir analizando la repercusión de las medidas paulatinamente. Y en segundo lugar, y quizás más importante, es que la vuelta a la actividad de las empresas supone una normalización en la oferta pero el problema que vamos a tener los próximos meses está en la demanda. El cambio en los hábitos a que nos va a llevar la nueva normalidad amenaza claramente a la demanda agregada.
A la hora de invertir conviene que la variable de las compañías que analicemos sea la demanda que sus productos o servicios van a tener en la nueva normalidad. Como he indicado anteriormente, vamos a tener una asimetría en el comportamiento de sectores y que va venir determinada por esta variable. Hay sectores cuya demanda va a permanecer deprimida durante más tiempo del deseado como el turístico, viajes, hostelería, quizás el inmobiliario y determinado comercio de grandes superficies. Para ver la recuperación de estas compañías vamos a tener que esperar más tiempo y puede que algunas se terminen quedando por el camino.
Como conclusión, estamos en un momento positivo por el factor constructivo de las medidas que se van a tomar y vamos a ver una recuperación paulatina en las bolsas y también en la deuda corporativa pero con un comportamiento asimétrico. Conviene ser selectivos en el posicionamiento valorando el impacto que en la demanda de las compañías tiene la nueva normalidad.
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Esta semana la evolución de la pandemia y la desescalada seguirán centrando la atención de los inversores que también deberán vigilar la publicación de resultados trimestrales de las compañías que se conocerán esta semana y sobre todo las previsiones de los mismos para los próximos trimestres, si es que se atreven a hacerlas. También se publican los PMIs de las principales economías mundiales de los que se esperan caídas importantes pero que no impactarán en los mercados por estar ya descontados. Esperamos una semana positiva en bolsas no exenta de algún día de ajuste por toma de beneficios.
Lunes: Balanza comercial de la Zona Euro y Japón.
Martes: Índice Zew de confianza inversora en Alemania y la Zona Euro. El Tesoro español subastará letras a 3 meses.
Miércoles: IPC en Gran Bretaña. Inventarios de petróleo crudo de la AIE en EE.UU.
Jueves: PMI´s en la zona Euro y EE.UU.
Viernes: Índice IFO de confianza empresarial en Alemania.