Aumentan las divergencias: Fuente de oportunidades

Continúan los movimientos laterales e irregulares en los mercados de renta variable internacional. Y esto va a ser así, como mínimo, hasta que se produzca el desenlace de las elecciones en Estados Unidos de la próxima semana o el acuerdo entre republicanos y demócratas sobre el programa de estímulo fiscal en EE.UU. Las medidas de restricciones tomadas en Europa, ante la segunda ola de la pandemia, frenaron cualquier ambición de rebote de los índices la pasada semana al calor de los resultados empresariales. El EuroStoxx 50 cedió un 1,44% en la semana y la volatilidad se extendió a Wall Street que cerró también una semana en negativo. La semana pasada también nos dejó un empeoramiento en la eurozona del índice de confianza PMI, revelando la divergencia que está provocando la pandemia entre el sector manufacturero y el sector servicios. Mientras que el PMI manufacturero superaba firmemente la zona de riesgo de contracción, llegando a los 54,4 puntos, el PMI del sector servicios se cayó hasta los 46,2 puntos.

Hay muchos términos que se han hecho habituales en nuestro vocabulario y que no utilizábamos antes de esta pandemia. También, en el análisis de mercados, vamos a tener que acostumbrarnos escuchar más de lo acostumbrado el término “divergencia”. Va a ser básico que comprendamos que hemos entrado en un mundo de divergencias. En las decisiones de inversión que vayamos a tomar debemos considerar, inevitablemente, la divergencia como un factor determinante.

La divergencia en Europa del impacto de la Covid-19 en el sector servicios y en el sector manufacturero, es un ejemplo. Pero nos vamos a encontrar con divergencias geográficas, divergencias sectoriales de segundo nivel e incluso entre compañías del mismo sector. La capacidad de respuesta, ante los nuevos inconvenientes que está marcando la pandemia, van a determinar la dirección que cada actor siga en este mundo de divergencias.

Pero la divergencia principal la vamos a encontrar entre el desarrollo o crecimiento de algunos índices y los indicadores técnicos del crecimiento de la economía. El año de contracción económica en Estados Unidos, así como mundial, ya tenemos al S&P 500 con una revalorización superior al 6,7 %. Y aunque hay otros índices que continúan deprimidos, por la divergencia geográfica, probablemente veamos en los próximos meses una mejora de los mismos. Esta divergencia principal encierra divergencias mayores dentro de las compañías que forman los propios índices. Compañías del sector tecnológico con valoraciones desbocadas y compañías de sectores más industriales o tradicionales, deprimidos.

Las divergencias también llegan a la deuda y a la renta fija. El momento de mayores déficits y endeudamiento de los países y de compañías, más facilidad de colocación de sus emisiones y menor interés que tiene pagar por su deuda. En este caso, consecuencia de la medicina de los Bancos Centrales contra la pandemia.

Debemos convivir con estas divergencias y no intentar luchar contra ellas. Asumirlas como nuevas reglas de juego y no perder de vista que las divergencias encierran importantes oportunidades a largo plazo que debemos intentar identificar.

Ahora que vivimos el momento en los que el lema de los Stark de Juego de Tronos “Winter is coming” retumba en nuestras mentes y hace aflorar nuestros miedos, debemos mantener una actitud más firme. En un mundo de divergencias, las implicaciones para la inversión de la llegada del invierno no tienen porque ser negativas.

Lo podríamos comprobar está misma semana, en la que se publicarán datos macro que denotarán cierta ralentización de la recuperación, pero que a su vez pueden ser un motivo para impulsar mayores estímulos por parte de los Bancos Centrales y gobiernos. Esto sería muy bien recibido por los mercados. Precisamente el jueves de esta semana tenemos reuniones de política monetaria del Banco de Japón y del Banco Central Europeo. Deberemos estar muy atentos a sus medidas y los mensajes que transmitan en la rueda de prensa posterior. Peores indicadores macro respaldarían un anuncio de mayores estímulos por su parte y darían un impulso a los mercados esta semana.

Para el componente agresivo de una cartera, nuestra gestora Bankoa Gestión cuenta con el fondo CA SELECCIÓN FLEXIBLE ISR, FI, un fondo flexible que adapta su composición de cartera a las expectativas de mercado y tiene en cuenta las divergencias presentes.

Además, en la selección de activos utiliza criterios ESG (Medioambientales, sociales y de Gobernanza).

Citas económicas de la semana:

Lunes: Tasa de desempleo en España. Índice IFO de confianza empresarial en Alemania.

Martes: Confianza del consumidor en EE.UU.

Miércoles: Inventarios de petróleo crudo de la AIE en Estados Unidos.

Jueves: Reunión de política monetaria del BCE y del Banco de Japón. IPC de España y Alemania. PIB trimestral en EE.UU.

Viernes: PIB trimestral de España, Alemania y la zona Euro. IPC de la zona Euro.

La importancia de las tecnológicas en la recuperación

Dejamos atrás una semana irregular en los mercados de renta variable internacional. Mejor en EE.UU que en Europa, donde los records de contagios de la segunda ola de la Covid-19 desvió el dinero hacia la deuda y beneficio al dólar. La irregularidad en el comportamiento semanal de la renta variable puede ser la tónica de las próximas semanas, hasta que se solventen las incertidumbres de segundo nivel que actualmente condicionan el signo de los mercados. Incertidumbres se segundo nivel como son: las elecciones en EE.UU., la resolución del Brexit o el acuerdo entre republicanos y demócratas sobre el nuevo programa de estímulos.

El vector de fondo y principal nivel sobre el que se asienta el comportamiento de los mercados, cuyo rumbo parece ser consensuado, es la evolución en la lucha contra la pandemia y su impacto en la economía. En este sentido, el cronograma de la contienda, aplaudido por la mayoría, es una vacuna los próximos meses, recuperación de los resultados empresariales y las economías en 2021 y superación de niveles económicos pre-crisis en 2022. Un pronóstico positivo que afianza un fondo alcista de los mercados, pero que inevitablemente dejará soldados caídos en el campo de batalla.

La salida de toda crisis económica necesita de sectores tractores que generen el suficiente efecto mariposa que arrastre al conjunto de la economía. En el cronograma que se ha definido de salida de esta crisis, estos sectores tractores ya han sido proclamados por el mercado. El sector tecnológico, en un primer plano y el sector de la alimentación, en un segundo, han sido los que mejor comportamiento han demostrado en esta crisis. Las nuevas formas de relacionarnos y de distribución de bienes y servicios, han supuesto y van a suponer la aceleración de la digitalización, de las inversiones en salud, movilidad y medio ambiente. Esto ha impulsado a las compañías más tecnológicas, asignándoles un importante papel como tractoras de la recuperación.

Para que se cumpla el cronograma base de la recuperación, se cuenta con que estos sectores tractores generen suficiente arrastre y efecto mariposa sobre el resto. En otras crisis, menos globalizadas, la construcción, la automoción o el sector turístico han cumplido satisfactoriamente con este papel. En esta ocasión ha tomado el relevo un sector poco tradicional, como es el tecnológico, pero que cada vez cubre más ámbitos de nuestras vidas. Dependemos de su buen desempeño para que la recuperación sea lo más acelerada posible.

Por lo tanto, es de especial relevancia los resultados que presenten las compañías de estos sectores, proclamados como tractores. Necesitamos que los resultados trimestrales de las compañías tecnológicas, que ahora se empiezan a publicar, no defrauden. La semana entrante publican resultados: Netflix, Amazon, Intel y Tesla, entre otras. Esta semana en las bolsas, en ausencia de otros catalizadores de mercados en el ámbito macro, un buen tono de los resultados del último trimestre de estas compañías pueden hacer frente a los malos datos de la segunda ola de la pandemia y de las nuevas restricciones que se irán conociendo.

Este es el papel, de importancia, que juegan las tecnológicas en estos momentos de la crisis y que se está viendo reflejado en sus valoraciones. Aunque, desde el punto de vista de las implicaciones para la inversión, no debemos perder de vista que esta recuperación, al amparo de las tecnológicas, también beneficiará a sectores actualmente penalizados. La ponderación de las tecnológicas ha aumentado en nuestras carteras, pero no debemos despreciar el desempeño de otros sectores en el momento post vacuna. Actualmente, el sector tecnológico es el protagonista, el tractor y el que probablemente determinará el ritmo de la recuperación, pero la diversificación de nuestras inversiones sigue siendo unos de los factores claves para optimizar el resultado a largo plazo. Las tecnológicas han llegado para quedarse en la cartera pero en su proporción justa y realizando una buena selección de estas compañías.

Como buena selección es la que realizan nuestros dos fondos ISR. En el fondo CA Selección Estrategia ISR, como fondo moderado, y en el fondo CA Selección Flexible, como fondo agresivo, se seleccionan activos que mejor cumplen con los criterios ESG (Medioambientales, Sociales y de Buen Gobierno) realizando una diversificación adecuada.

CITA ECONÓMICAS DE LA SEMANA

Lunes : PIB y desempleo en China. Declaraciones de Powell, presidente de la FED. Comparecencia de Lagarde, presidenta del BCE.

Martes: Índices de precios de producción en Alemania.

Miércoles: IPC en Gran Bretaña. Libro Beige de la Fed

Jueves: Tasa de desempleo en España. Nuevas peticiones de subsidio por desempleo en EE.UU.

Viernes: PMIs preliminares de las principales economías mundiales.

Todos los caminos llevan a invertir

En las dos últimas semanas ha regresado el buen tono a los mercados de renta variable internacional. La semana pasada Wall Street ha cerrado su mejor semana desde agosto, con avances del 3,84% en el S&P 500 y del 3,27% en el industrial Dow-Jones. La tecnología volvió a ser apetecida por los inversores, liderando las subidas. El Nasdaq-100 se apuntó un avance semanal del 4,18%. La vieja Europa se subió al carro cerrando también la semana en positivo. El EuroStoxx 50 avanzó un 2,58% y nuestro IBEX 35 un 2,91%. La entrada de liquidez en los mercados se apreció también el mercado de deuda, situando la rentabilidad de la deuda española a 10 años en el 0,171%, su nivel más bajo desde septiembre del 2019.

Paradójicamente, los momentos en los que aumentan las probabilidades de imponer mayores restricciones en las principales economías, debido a la intensificación del rebrote de la Covid-19, los mercados financieros mejoran sustancialmente su tono. La asunción por parte de los inversores de que, tarde o temprano, llegará un paquete de estímulos a la economía estadounidense y una mejoría en datos macro, ha sido suficiente para obviar algunas de las incertidumbres que acechan a corto plazo. La cercanas elecciones estadounidenses, la guerra arancelaría cuyo tratado de paz está pendiente de firma, los rebrotes y el Brexit eterno, no tienen peso suficiente para aplacar el ánimo inversor.

¿Es este otro de esos comportamientos inexplicables por fundamentales y en los que domina el aspecto emocional? Creo que en esta ocasión no es tan sencillo. La promesa de estímulos continuados por parte de los gobiernos y la liquidez infinita confirmada por los Bancos Centrales está creando una de las paradojas económicas más determinantes de los últimos años. Cuanto más dificultoso sea salir de esta crisis mejor comportamiento dibujarán en general los mercados, porque esperan un mayor caudal de liquidez. Por otro lado, cualquier buena noticia, como tal, también va a ser bien recibida.

El inversor asume esta paradoja porque cualquier postura contraría puede ser perjudicial a sus intereses. El estado de liquidez en el inversor de largo plazo, tan anhelada el pasado mes de marzo, es ahora una posición penalizadora. Los mercados, apuntalados por los bancos centrales, presentan una seguridad irresistible ante la alternativa, cada vez más cercana, de pagar por los depósitos o de ser devaluado por la inflación que llegará con la recuperación. Es probable que ante esta circunstancia, incluso excedentes de corto y medio plazo lleguen a los mercados. Todos los caminos llevan a permanecer invertido o invertir los excedentes

La liquidez inyectada por bancos centrales y gobiernos va a llegar a los mercados, como ha sucedido en otras ocasiones. Cuanta más liquidez sea necesaria inyectar, para recuperar la economía, más liquidez llegará a los mercados. La paradoja de la covid-19 llevará, en general, a revalorizar los activos, dejando en un segundo plano su valoración por fundamentales. Podemos entender que esta revalorización no será lineal para todas las compañías y sectores, por lo que no conviene olvidarse de realizar una buena diversificación y selección dentro de las carteras.

Estamos en un buen momento para la inversión porque todos los caminos nos llevan a permanecer invertidos o tomar posiciones. No hay motivo para estar fuera de mercado en estos momentos Pero no debemos olvidar respetar nuestro perfil de riesgo como inversor en la selección de activos, la diversificación y la constancia. Apoyarse en su asesor de Banca Personal de Bankoa es la fórmula para cumplir con estos principios y definir la mejor solución de inversión en su caso.

CITAS ECONÓMICAS DE LA SEMANA:

Lunes: Festividad en España con mercados abiertos.

Martes: Desempleo en U.K. IPC de Alemania y de EE.UU. Índice ZEW de confianza inversora en Alemania y en la zona euro. El Tesoro español subastará letras a 3 meses.

Miércoles: IPC de España. Producción Industrial en la Zona Euro.

Jueves: IPC de China. Petición de subsidios de desempleo en EE.UU. El Tesoro español subastará bonos a 3 y 5 años y obligaciones a 10 años.

Viernes: IPC de la Zona Euro. Ventas minoristas en EE.UU.